El Club de las Diosas ¡Es cuestion de actitud! Un blog para latinas acerca de la familia, moda, belleza, cocina, viajes y vida.
No cabe duda que este verano fue uno de los mas emocionantes que hemos tenido. Disfrutamos cada momento al máximo y pudimos relajados como queríamos. Mi meta era lograr que hiciéramos cosas nuevas, experimentar y explorar la vida de una manera diferente.
Creo que fue por eso que lo disfrutamos tanto. Hasta mi hijo me dice que ha sido el mejor de sus veranos. Y es que hicimos mucho en tampoco tiempo. Todo fue bien organizado y a la vez hubo muchas sorpresas.
Estuvimos en una estadía dentro de una cabaña, celebramos el cumpleaños de mi hijo en la piscina de un hotel, fuimos a Legoland, tuvimos encuentros cercanos con reptiles y cocodrilos en Gatorland y hasta visitamos a dos museos de niños. Todo eso en una semana.
Y necesitábamos algo así, completamente diferente. Algo refrescante que en realidad “gritara” verano y no “aquí vamos otra vez”. Lo mejor de todo esto es que dentro de todos los viajes que hicimos, sabia que mi nene estaba seguro. Que su asiento de carro lo iba a proteger no tan solo durante estos viajes, sino también en todos los siguientes.
Pero como todo al fin, el verano tenia que acabarse. Empezamos entonces con los preparativos de la escuela. Mi nene estaba bien emocionado porque iba a comenzar su primer grado. Se sentía grande, iba a ser emocionante llegar a la escuela y conocer una nueva maestra y amigos.
Fue entonces cuando esa emoción se hizo mas grande ya recibimos el nuevo asiento para el camión de Papa. Casi nunca usamos el camión de Papa ya que #1 gasta mas gasolina y #2 no teníamos un asiento Britax y por lo tanto no me sentía segura en irnos en un paseo largo en el.
El proceso fue simple y como sabia que era el ultimo asiento de carro que iba a tener antes de ser oficialmente un niño “grande”, solicite la ayuda de mi hijo para escogerlo. Visitamos la pagina del Internet de Britax. Vimos los diferente estilos de “Booster Seats” que tienen. Uno de los retos grandes era que tenia que caber en la cabina de la camioneta y que mi hijo se sintiera seguro. Seleccione donde decía “Fit my child” y entre todos los datos. Entonces me enseño mis opciones.
Decidimos que este modelo iba a ser el mejor para nosotros según las recomendaciones. Entonces de aquí solo fuimos al área de escoger el color que mi hijo quería y en par de semanas y justo antes de entrar a la escuela, llego su nuevo asiento de carro. La instalación fue fácil y lo hicimos en menos de una hora.
Entonces así como llego el verano y se fue, llega el otoño. Con un asiento de carro nuevo para mi nene y nuevas aventuras por vivir.
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Esta entrada ha sido auspiciada por Britax como parte del Panel de Blogueras Oficiales de Britax. Todas las opiniones son mías.
